La madre desde un punto de vista sistémico y arquetípico tiene que ver con la abundancia, la vida, la multiplicación, la creación y la creatividad, el dinero y el desarrollo.
Los hombres del sistema pueden trasmitir, también, estas características, pero si no lo hacen desde el equilibrio, crean una economía caótica y excluyente como pasa en la actualidad. Por otro lado, si las madres no trasmiten estos valores, la carencia se suele adueñar de las familias.
Como en el caso del padre, tomar a la madre, no implica tomar sus patrones ni sus carencias. Honrarla en profundidad es un trabajo de bastante tiempo, pero cuando se consigue, el dinero y la abundancia está mucho más cerca, haya vivido ella lo que haya vivido en relación con este tema.
Nuestra madre cuando nos engendra, conoce nuestro propósito de vida y nuestras posibilidades. Somos parte de su cuerpo durante nueve meses y durante los primeros años de vida es, sin duda, la figura principal.
La identificación de Madre, casa, cuerpo, es muy importante.
Nuestra casa actual es un reflejo, en muchos aspectos, de lo que ha sido la relación con nuestra madre en el útero y los primeros años de vida. Asimismo nuestra relación con el dinero, la abundancia y la creatividad, tiene que ver absolutamente todo con ella.
Aparte del trabajo sistémico, conviene hacer un trabajo de los principales patrones que hemos recibido de ella. Renunciar a los patrones maternos no significa en absoluto renunciar a nuestra madre. Más bien al contrario, significa acercarnos a su esencia.
En el caso de los patrones específicamente uterinos, al estar más escondidos en el inconsciente, conviene hacer un trabajo específico de Respiración consciente o de regresiones, para sanarlos.