El dinero no es algo sólido, sino una energía líquida o de flujo. El dinero tiene un alto valor energético y manifiesta una de las grandes funciones del universo: la capacidad de creación. Das dinero y aparecen en tu vida bienes y servicios.
Quizá no expresa toda la potencialidad de la capacidad de creación, pero es el instrumento que tenemos en el planeta. Utilizando un símil futbolístico, “si no tienes un campo de hierba para jugar al futbol, utiliza el campo de tierra que si tienes”
En los manuales de Economía, se definen las características del dinero como:
- Medio de pago,
- Depósito de valor y
- Medio de intercambio.
En una sola frase, tener capacidad de pago, utilizarlo para intercambiar bienes y servicios y tener algo que tiene el valor económico que dice representar, porque así lo reconocen todos los bancos centrales, es algo necesariamente bueno y deseable.
Solo se puede percibir como algo negativo por las asociaciones que se hace de él y por el mal uso que puedan hacer algunos. Sería como culpar al fuego de la destrucción de los edificios, y no a los pirómanos que lo provocan.
El dinero tiene en su utilización dos grandes funciones, o bien sirve para gastar, o bien sirve para ahorrar e invertir.
Dentro de la capacidad de creación, una de las características del dinero es su capacidad de multiplicación.
Los manuales de Economía muestran como multiplican los bancos el dinero, con solo el hecho de tenerlo y de que no se les obligue a tener que mantenerlo líquido y puedan invertirlo.
Si solo les obligan a mantener líquido un 10% del total de los depósitos, partiendo de 1000$, lo multiplican a 10.000 (1/coeficiente legal de reservas).
La cifra suele ser inferior al 10% y la multiplicación por tanto mayor. (si fuese del 5% de 1000$ pasaría a 20.000$).
Los bancos pueden multiplicar. ¿Y tú? Ellos saben que tienen, ¿Y tú?
Por último decir que hay personas que atraen dinero y otras no.
Algunos incluso se arruinan y vuelven a multiplicarlo. Esto nada tiene que ver con la suerte o los estudios. Volvemos a la frase del Evangelio, “Al que tiene se le dará y al que no tiene se le quitará hasta lo que no tiene” En el caso del dinero como en tantos otros, todo es pura atracción. ¿Quieres aprender?