LA MADRE, EL DINERO Y LA VIDA

Con nuestra madre compartimos nuestros primeros éxitos. Nuestro camino hacia la vida nace con ella desde la concepción y se desarrolla con ella durante los nueve meses de la gestación. Con ella nacemos a la vida en este plano físico, y su amor y sus cuidados en nuestros primeros años son esenciales para nuestro desarrollo y crecimiento como personas, ya que afecta a muchas áreas de nuestra vida como pueden ser, el dinero, la salud física, la economía, la confianza en la vida, la relación con nuestro país, la conexión con nuestras raíces, el amor hacia nosotros, el respeto por lo que somos, la relación de pareja y también el autorreconocimiento y el merecimiento que luego nos ayudará a desarrollar nuestro padre.

Quien, a través de la gestación, el nacimiento y la lactancia, logra tomar de su madre, será dichoso y feliz, y logrará sentar las bases de proyectos exitosos. Si nuestra madre está integrada en nuestra vida la confianza en la vida, el amor y el compromiso se encuentran garantizados. La conexión con la madre permite que nos volvamos personas creadoras y creativas, multiplica nuestras ganas de vivir y propicia que el amor y la vida se multipliquen en todas las áreas de nuestra vida. Como consecuencia el dinero y la economía crecen, y la alegría y el compromiso con nuestra vida se multiplican. Nuestras relaciones con los demás se vuelven más libres y auténticas, incluida nuestra pareja y nuestra vida se vuelve más fácil y placentera.

La interrupción del movimiento hacia la madre puede traer graves, a veces gravísimas consecuencias para nuestra vida y nuestro éxito.